Desde que era niño mi ilusión fue tener un restaurante, y mi pasión la cocina italiana. Mi padre me inculcó sus conocimientos y sus ganas de cocinar la “vera cucina italiana”. Mi carrera comenzó en la Escuela de Hostelería de Sevilla, en 1.999, en su VI Promoción, junto a mis compañeros, amigos y socios actuales. Mi carrera laboral empezó en El Racó de Can Fabes, Sant Celoni, Barcelona, restaurante del desaparecido Santi Santamaría de 3 estrellas Michelín, en 1.999. Al siguiente año, decidí cambiar la hostelería por la hotelería, trabajando en el departamento de recepción del Hotel Guadalmina en Marbella. Posteriormente, comienza mi relación laboral con Alemania, trabajando en todos los departamentos del hotel en la cadena Victor´s, tanto en Leipzig como en Sarbrucken, durante un año. Ya en España, sigo mi andadura en hoteles en el grupo Accor, en Novotel Sevilla, pasando de ayudante de recepción a segundo jefe del departamento. Gracias a una baja, volví a la restauración, como jefe de sala, pasando al poco tiempo a Director de Alimentos y Bebidas. Cargo que desempeñe, también, en Novotel Málaga, hasta que mi incliné por este proyecto, que actualmente, sigue siendo mi motivación gracias a mi mujer, mi familia, mis amigos, mis socios, mi equipo y mis clientes.

Estudiante de tercero de Derecho reconvertido a Cocinero por afición .Mis primeros inicios en la cocina vienen desde pequeño viendo cocinar a mi abuelo cuando yo tenía 10 años. Pase de la Facultad de Derecho a La escuela de Hostelería de Sevilla, donde combiné mis dos pasiones: la cocina y el mundo del Vino. Trabajé y me formé como cocinero en esa etapa en el Restaurante del Consejo Regulador de la D.O. Somontano en Huesca, en 1999. Posteriormente en el Restaurante Salvador Gallego (1 Estrella Michelin) de Madrid, en el año 2000, y en el prestigioso Restaurante El Celler de Can Roca (3 estrellas Michelin) en 2001 en Girona. Toda esta experiencia me sirvio para empezar a ejercer cargos de responsabilidad como Jefe de cocina en Restaurante del Real Club deTenis de Sevilla (2002), en el Restaurante San Marcos de la calle cuna, en Sevilla, en 2003, jefe de cocina de la Escuela taller de Cocina Almadén en 2004, en el Hotel Molino del Arco **** en Ronda desde 2004 hasta 06 y en el Hotel EME Catedral***** en Sevilla durante dos años, desde 2007. Después de esta experiencia, decidí, junto a mis compañeros y amigos de la escuela de Hostelería, unirme al proyecto del Restaurante Il Basilico, ya como socio propietario.

Las claves para una buena receta:
Mis primeras experiencias con la cocina no empiezan precisamente dentro de ella. Siendo niño, surgen de  la necesidad u obligación de acompañar a mi madre o a mi abuela en las compras diarias; ese mundo me llamaba la atención,  me fascinaba.
Siguen pasando los años y esa sensación  hizo mella, esa curiosidad no se quedaba ahí, en la relación con el producto. Vivía una continua enseñanza de nuevos alimentos, dependiendo de la temporada,  de los tamaños a utilizar según el plato o incluso, de la disposición económica del hogar en ese momento. Esta sabiduría cotidiana y familiar continuaba después en casa: pelando ajos o patatas, pegado al fuego viendo cómo cocinaban… imposible borrar aquellos momentos y olores.
De aquí viene mi gusanillo por el mundo de la gastronomía  aunque, no es hasta años más tarde y gracias a mi padre y a mi tía que me ayudaron, cuando me decido  a entrar en  la escuela de hostelería de Sevilla. Curso mis estudios de cocina en la Escuela de la Taberna del Alabardero de Sevilla; es allí donde empiezo a profundizar en el tema de la gastronomía y conozco el mundo de la cocina a nivel profesional .Tengo la oportunidad de ampliar mis conocimientos  en  restaurantes como Don Giovanni en Madrid, con Fabio Morisi;  El Cenador de Salvador, de Salvador Gallego Moralzarzal Madrid y El Celler de Can Roca de los hermanos Roca, en Gerona.

La andadura profesional prosigue adquiriendo experiencias y continua formación en diferentes lugares: Restaurante San Marcos, Restaurante Coteccio  Gran Casino, Restaurante  El Esturión…
Esta receta continúa añadiendo la ilusión de Il  Basilico, donde tres locos se embarcaron en el sueño de montar su primer restaurante.
Gracias kali por esa paciencia infinita, gracias papá  por ese apoyo continuo, gracias tita por esa confianza ciega durante años,  gracias familia por estar ahí.
Algo muy importante para obtener  una buena elaboración es que nunca falte la comunicación.
El recuerdo es el único paraíso del cual no podemos ser expulsados